¡RESPETEMOS LAS CREENCIAS DE LOS BARRISTAS!

Por: ANDDY LANDACAY HERNANDEZ

Es evidente que la pasión por el fútbol es una religión más. Los templos son los estadios. Los fieles son los hinchas, las arengas son los cánticos celestiales y el gol es la epifanía mayor. La iconografía sagrada va desde los tatuajes, los grafitis, las banderolas y los posters. No hay duda de que Dios tiene forma de pelota y por ello agredir, matar o defender con la vida la parafernalia de un equipo es algo que debe ser absolutamente respetado. Sigue leyendo